Victor Vasarely, considerado el padre del arte óptico o perceptual decía que “La geometría es capaz de representar las leyes del universo. El camino está en la búsqueda de la geometría en el interior de la naturaleza”.
Los artistas y movimientos artísticos que desde hoy dialogan con nuestras exhibiciones y colecciones, buscan involucrar a la audiencia de manera integral y activa, no como espectadores sino, como participantes dinámicos. A veces valiéndose de formas que juegan descaradamente con nuestra percepción, otras, retando nuestros conceptos tradicionales y todas haciéndonos reflexionar sobre cuan real es lo que vemos, lo que creemos ver, lo que damos por cierto y aquello de lo que tenemos la ilusa certidumbre de falsedad.
Similar labor desarrollamos en un museo de historia como el nuestro: retamos percepciones, creencias, formas tradicionales de ver los temas, y lo que es más importante: retamos lo que se da por comprobado, ofrecemos nuevos puntos de vista y perspectivas. Ponemos el pensamiento en movimiento y estimulamos el pensamiento creativo.
Ofreciendo a nuestra audiencia, una visión integral de los conceptos, las perspectivas y los desafíos que nos presenta este permanente estado de emergencia, al que llamamos vida cotidiana.
De ahí que los museos del siglo XXI afrontemos nuestros retos de interpretación y comunicación desde la integración de las expresiones creativas, que permiten establecer un diálogo reflexivo entre Ciencia, Arte, Filosofía e Historia, que se unen en nuestros museos de hoy, para facilitar y ampliar otras vías de comprensión de nuestro mundo y así promover el pensamiento creativo como forma natural de enfrentar esa vivencia cotidiana. Acogemos con entusiasmo la exposición “Diálogos entre los sentidos: un viaje de la abstracción perceptual entre América y Europa” del 31 de mayo hasta el 28 de julio.